Verónica Abad regresa a Ecuador para defender su derecho constitucional
La suspendida vicepresidenta busca asumir funciones presidenciales temporales en medio de un clima político tenso.
Verónica Abad, suspendida vicepresidenta de Ecuador y embajadora en Israel, ha retornado al país este miércoles para reivindicar su derecho a asumir la Presidencia de forma temporal, según lo contempla la Constitución, cuando el mandatario Daniel Noboa solicite licencia para la campaña electoral de cara a las elecciones de 2025.
"Estoy aquí, pueblo ecuatoriano, para dar la cara en mi país. Se me ha prohibido hablar y prácticamente se me ha mantenido encerrada", expresó Abad a su llegada al aeropuerto internacional de Quito. Denunció que ha sido víctima de "indefensión" tras la suspensión de sus funciones en un proceso administrativo que calificó como "ilegal e ilegítimo".
La suspendida vicepresidenta de Ecuador y embajadora en Israel, Verónica Abad. EFE/José Jácome
La suspensión y sus implicaciones
El pasado 9 de noviembre, el Ministerio de Trabajo sancionó a Abad con 150 días sin remuneración, argumentando "abandono injustificado del trabajo". Según el Gobierno, la entonces embajadora no cumplió con las fechas establecidas para trasladarse de Israel a Turquía durante la escalada de tensiones en Oriente Medio.
Esta medida ha sido criticada por políticos, abogados y hasta candidatos presidenciales, quienes consideran que se trata de violencia política y una acción inconstitucional. Abad, por su parte, ha señalado que la sanción representa un atentado contra la independencia de poderes y el orden constitucional del país.
"El Estado de Derecho y la supremacía constitucional son sagrados", subrayó la funcionaria, afirmando que su regreso al país fue un "acto de rebeldía" financiado con recursos propios.
Un enfrentamiento político y personal
El conflicto entre Daniel Noboa y Verónica Abad no es nuevo. Desde antes de asumir sus respectivos cargos en noviembre del año pasado, ambos han mantenido tensiones que se reflejan en la designación de Abad como embajadora en Israel y en las denuncias de la vicepresidenta por presunto acoso y violencia política de género.
En respuesta al distanciamiento, Noboa designó a Sariha Moya como vicepresidenta encargada, una medida que Abad ha denunciado como un intento de eludir el mandato constitucional que la coloca como sucesora directa del presidente en caso de ausencia.
Además, Abad enfrenta ataques personales, mencionando juicios contra su hijo por supuesta oferta de tráfico de influencias. "Esta persecución tiene que parar ya. Estoy aquí para pedirle al presidente que me diga qué tiene conmigo", reclamó.
Esperanza en la justicia
A pesar de los contratiempos, Abad confía en los resultados de una audiencia judicial programada para el 27 de noviembre, donde se revisará una acción de protección presentada por su defensa. Aunque no obtuvo medidas cautelares iniciales, continúa buscando mecanismos legales para revertir su suspensión y reinstaurar el orden constitucional.
"Estoy aquí para mostrar la cara a la justicia y pedir medidas cautelares que me devuelvan mis derechos", declaró, añadiendo que espera reunirse con organizaciones sociales para impulsar la unidad en Ecuador.
Con el retorno de Abad, la situación política ecuatoriana se intensifica, en un escenario donde la vicepresidenta suspendida busca retomar su papel y ejercer la Presidencia temporal, enfrentando tanto desafíos legales como tensiones con el mandatario actual.
Con información de: EFE