Argentina instalará valla de 200 metros con alambre de púas en su frontera con Bolivia
La medida busca frenar pasos ilegales y combatir los delitos transfronterizos en el marco del plan 'Fronteras blindadas'.
El Gobierno de Argentina anunció la construcción de una valla de alambre de púas de 200 metros de largo en el cruce fronterizo con Bolivia, específicamente en la localidad de Aguas Blancas, provincia de Salta. La obra, destinada a controlar pasos ilegales, fue publicada este lunes en el Boletín Oficial de la provincia como parte del plan 'Fronteras blindadas', impulsado por el Ministerio de Seguridad argentino.
Fotografía del paso fronterizo entre Bolivia y Argentina, en Villazón (Bolivia). EFE/ Paolo Aguilar
La estructura, con una altura de 2,5 metros, se extenderá desde la oficina migratoria de Aguas Blancas hasta la terminal de autobuses locales. El objetivo principal es evitar el flujo migratorio irregular entre la ciudad argentina y la localidad boliviana de Bermejo, situada en la provincia boliviana de Arce.
Adrián Zigarán, interventor de Aguas Blancas, explicó a Radio Mitre que actualmente “las personas cruzan el muro de contención contra inundaciones para ingresar o salir de manera irregular”. Con la valla, se busca redirigir el tránsito hacia los controles migratorios establecidos.
La iniciativa se enmarca en el Plan Güemes, presentada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, el pasado diciembre en Salta. Este plan incluye medidas para combatir el narcotráfico, el contrabando y la trata de personas, además de reforzar la seguridad en áreas críticas como el río Bermejo y la Ruta Nacional 34, conocida como la “ruta de la droga”.
En este contexto, se desplegarán 310 efectivos de fuerzas federales, entre ellos agentes de Gendarmería y Prefectura, que supervisarán los puntos más vulnerables de la frontera.
El anuncio de la construcción de la valla ha generado preocupación en el Gobierno boliviano, que, a través de su Cancillería, pidió abordar los temas fronterizos mediante mecanismos de diálogo bilateral. “Cualquier medida unilateral puede afectar la buena vecindad y la convivencia pacífica entre pueblos hermanos”, expresó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia en un comunicado.
Sin embargo, Zigarán respondió que el Gobierno boliviano “está mal informado” sobre la situación y destacó que Argentina aporta más recursos humanos en los controles integrados en la frontera. “En el puerto Chalana tenemos dos controles: nosotros ponemos cuatro o cinco trabajadores de Migraciones, mientras Bolivia solo pone uno”, afirmó.
El anuncio de esta medida unilateral por parte de Argentina pone de manifiesto los desafíos en la gestión de las fronteras compartidas y el equilibrio entre la seguridad nacional y la cooperación internacional. La construcción de la valla busca atender problemas urgentes, pero también pone sobre la mesa la importancia de fortalecer el diálogo binacional para abordar de manera coordinada los temas en común.
Con información de: EFE