Células madre mesenquimales: una promesa revolucionaria para la regeneración del cartílago
Un análisis exhaustivo destaca los avances y retos en el uso de la terapia regenerativa para tratar la osteoartritis, una de las principales causas de discapacidad en el mundo.
El artículo "El uso de la terapia con células madre mesenquimales en la regeneración y reparación del cartílago dañado en la artrosis" de Guanoluisa-Andagua & Estrada-Zamora (2024), explora los avances recientes en el tratamiento de la osteoartritis (OA). Este estudio detalla cómo las células madre mesenquimales (MSC, por sus siglas en inglés) podrían revolucionar la medicina regenerativa al enfocarse en la restauración del cartílago dañado, una de las principales causas de dolor y pérdida de movilidad en adultos mayores.
La osteoartritis, una enfermedad degenerativa que afecta principalmente a las articulaciones de rodillas, caderas, manos y columna vertebral, afecta a más de 302 millones de personas en el mundo. Con una población global en envejecimiento, se proyecta que esta cifra aumentará significativamente para 2050. Los enfoques terapéuticos actuales, como analgésicos, fisioterapia y cirugías de reemplazo articular, no abordan la causa subyacente del problema: la degradación del cartílago.
Las MSC, obtenidas de tejidos como médula ósea, tejido adiposo y cordón umbilical, destacan por su capacidad para diferenciarse en múltiples tipos celulares y regenerar tejidos dañados. Según el artículo, estas células pueden:
Reparar el cartílago: Estimulan la producción de colágeno y proteoglicanos, esenciales para la estructura y función del cartílago.
Reducir la inflamación: Modulan el sistema inmunológico, creando un entorno propicio para la regeneración.
Promover la regeneración tisular: Liberan factores de crecimiento que activan la proliferación celular y la angiogénesis.
La administración localizada de MSC ha demostrado ser la vía más eficaz, maximizando sus efectos terapéuticos y reduciendo el riesgo de rechazo inmunológico.
Aunque prometedora, esta terapia enfrenta desafíos importantes. La variabilidad en la calidad de las MSC y la falta de estandarización en los protocolos representan barreras significativas. Además, se necesitan estudios a largo plazo para evaluar posibles efectos secundarios, como la formación de tumores.
Desde una perspectiva ética, es decisivo garantizar que las células madre se obtengan de manera responsable y accesible, evitando la mercantilización de estos tratamientos.
El artículo concluye recalcando que la terapia con MSC podría convertirse en un estándar de tratamiento para la OA, mejorando significativamente la calidad de vida de millones de personas. Sin embargo, su implementación a gran escala dependerá de los avances en investigación clínica, regulación y accesibilidad.
Lee el artículo completo aquí.