LEGO y el nacimiento de un ícono de la creatividad
Un 28 de enero de 1958, la empresa danesa LEGO patentó su ladrillo emblemático, revolucionando el mundo de los juguetes de construcción.
En medio de la Gran Depresión, en 1932, el carpintero danés Ole Kirk Christiansen fundó un pequeño taller en Billund, Dinamarca, donde comenzó a fabricar juguetes de madera. Buscando un nombre para su empresa, en 1934, surgió "LEGO", una contracción de las palabras danesas "leg godt", que significan "juega bien".
Un juego de expansión Lego de alrededor de 1955
La verdadera revolución llegó el 28 de enero de 1958, cuando LEGO patentó el diseño de sus ladrillos de plástico interconectables. Este sistema de unión por tubos proporcionó una estabilidad y versatilidad sin precedentes, permitiendo a niños y adultos construir estructuras complejas y fomentando la creatividad.
Desde entonces, LEGO ha evolucionado constantemente, introduciendo nuevas líneas de productos, colaboraciones con franquicias cinematográficas y videojuegos, y expandiéndose a parques temáticos como LEGOLAND. Además, la empresa ha mostrado un compromiso con la sostenibilidad, explorando materiales alternativos para sus ladrillos y estableciendo objetivos para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Hoy, 67 años después de aquella patente, LEGO sigue siendo sinónimo de creatividad, aprendizaje y diversión, manteniendo su relevancia en un mundo en constante cambio.