Educación e infraestructura: pilares para el progreso de América Latina
Los expertos destacan la importancia de las inversiones estratégicas en educación y obras públicas para superar barreras estructurales en la región.
La educación deficiente, la desigualdad persistente y la falta de infraestructura adecuada limitan el desarrollo de América Latina, pero expertos señalan que el nearshoring y una mejor gestión fiscal ofrecen oportunidades clave.
Una región en busca de soluciones sostenibles
América Latina enfrenta desafíos económicos y sociales significativos, pero también se encuentra ante una oportunidad única para redefinir su papel en la economía global. Así lo destacan William Maloney, economista del Banco Mundial, y Meiman Hock, consultora en comercio internacional, quienes resaltan la necesidad de abordar problemas estructurales como la educación deficiente, la precariedad en infraestructura y la inseguridad.
Pese a que se han controlado los niveles de inflación, el crecimiento económico sigue estancado. Maloney afirma que el bajo crecimiento y la desigualdad persistente son los mayores obstáculos para el progreso:
"Estamos ganando la batalla contra la inflación, pero necesitamos movilizar recursos de forma más efectiva para reducir las brechas sociales y garantizar oportunidades equitativas".
La educación, un desafío prioritario
La falta de avances significativos en educación en las últimas décadas sigue siendo un problema crítico en la región. El Banco Mundial propone soluciones como la capacitación docente, contratos de desempeño y mejoras en infraestructura educativa. En Ceará, Brasil, por ejemplo, la introducción de contratos de desempeño ha logrado resultados positivos, lo que demuestra el impacto de estrategias bien planificadas.
Hock advierte que la falta de acceso a educación de calidad tiene un impacto directo en la estabilidad social:
"Cuando las familias deben recurrir a colegios privados cada vez más costosos, se genera descontento y aumenta el malestar social en muchos países".
Nearshoring: una oportunidad desaprovechada
La relocalización de cadenas de suministro, conocida como nearshoring , presenta un potencial significativo para América Latina. Países como Costa Rica han atraído inversiones importantes en sectores tecnológicos, pero Maloney subraya que la región en general está rezagada frente a Asia y Europa del Este.
"Para aprovechar esta oportunidad, necesitamos una estrategia clara que aborde la falta de infraestructura, la capacitación laboral y las regulaciones complejas", señala el economista.
Inversión en infraestructura y seguridad
La mejora en infraestructura es crucial para el desarrollo. Aunque países como Colombia han adoptado modelos innovadores para atraer inversión privada, estos esfuerzos aún son insuficientes. Además, la inseguridad sigue siendo un obstáculo importante. En México, por ejemplo, algunas empresas destinan hasta un 10% de sus ingresos a seguridad privada, lo que afecta el clima de negocios.
Hock enfatiza que la inseguridad no solo impacta a las empresas, sino también a las comunidades:
"Sin un entorno seguro, es imposible hablar de desarrollo sostenible o equidad social".
Acción coordinada y voluntad política
Ambos expertos coinciden en que América Latina tiene el potencial para convertirse en un motor global de crecimiento, pero esto requiere acciones estratégicas y cooperación internacional.
"La región debe priorizar la inversión en capital humano, simplificar las regulaciones y mejorar la eficiencia institucional. No se trata de soluciones rápidas, sino de un compromiso a largo plazo", concluye Maloney.
Con estrategias claras y un enfoque coordinado, América Latina podría superar sus barreras estructurales y consolidarse como un actor clave en el escenario global.
Con información de: vozdeamerica.com